Duración

60-120 minutos.

Objetivo

• “Imaginar” el futuro y elaborar los pasos que hay que dar para llegar.

• Definir las metas de campaña, incluyendo las metas a corto y medio plazo.

Preparación/materiales

Papelógrafo y rotuladores.

Dinamización

Para “imaginar el futuro” se empieza escribiendo en la parte de arriba del papel una visión con la que todo el grupo esté de acuerdo. Debajo, se escriben metas que el grupo crea necesarias para hacer realidad esa visión. Se pide al grupo que seleccione la meta más conveniente para orientar su trabajo, y que piense para qué fecha podría cumplirse.

Se anima al grupo a imaginar que ya están en ese año. ¡Su visión se ha cumplido! Se hace la pregunta siguiente: ¿qué condiciones se han tenido que cumplir para alcanzar esa meta? ¿Cómo han cambiado las actitudes y comportamientos de la gente? ¿Ha habido cambios en las políticas del gobierno o en otras instituciones? ¿Cuándo tuvieron lugar esos cambios? Se sitúan los cambios en un papel, empezando con la meta y trabajando hacia atrás desde la meta (el futuro) hasta donde estamos ahora (el presente).

Una vez completado el dibujo, desde la meta de la campaña hasta el momento presente, podría ser útil priorizar los cambios que se tienen que producir. La tabla a continuación puede ser útil para ello. Hay que dar a cada cambio un número de cero a cuatro.

Para cumplir o evitar que se cumpla nuestra meta, este cambio es...

Los cambios que, al ser examinados con más detalle, sean irrelevantes, deberían ser eliminados de la gráfica, porque no aportan nada en la consecución de la meta o la visión de la campaña.

Además, se pueden añadir cambios que supondrían amenazas a la visión o la meta de la campaña, y que deberían ser evitados. Esto puede ayudar al grupo a tomar conciencia de los peligros que amenazan a su estrategia. Una dinámica como “Los pilares del poder” o el “espectro de alianzas” puedan servir de apoyo a este proceso.

Se debe animar al grupo a reflexionar sobre cada cambio, moviéndonos desde la meta (futuro) hasta la situación presente, considerando los cambios relevantes y los que hacen falta que se produzcan para lograr nuestra meta. Se debe hacer esto hasta llegar adonde se está “ahora”.

Al final del proceso, se tendrá una cadena de cambios entrelazados y en paralelo que proporcionará una buena imagen de cuáles podrían ser las metas de la campaña a corto y medio plazo. Una campaña podría centrarse únicamente en algunas de estas cadenas de cambios si, por ejemplo, otras organizaciones ya trabajan en otros aspectos del cambio.

Esta dinámica se basa en los talleres de Elise Boulding “Imaginemos un mundo sin armas”, que pedía a las personas participantes que imaginaran cómo sería “un mundo en paz dentro de treinta años”.